20/1/07

Clamorosos errores

Clamorosos errores, contradicciones, omisiones e inconsecuencias

(A propósito del artículo de Maryluz Vallejo Mejía "Luis Vidales: una vida de sonoras contradicciones", Unicarta, Universidad de Cartagena, n.101, pp. 91-103, mayo de 2004).

Con casi dos años de retraso vengo a enterarme de que la Dra. Maryluz Vallejo Mejía (en adelante MVM) ha publicado un artículo sobre la contradictoria vida de Luis Vidales. Me sorprende, porque habiéndose comunicado previamente conmigo por la vía del correo electrónico para solicitarme información, que gentilmente le facilité, suponía que en Colombia se respeta la regla de cortesía académica de enviar a los informantes y personas consultadas una copia de la publicación pertinente. Veo ahora que no es así, y habiendo obtenido el texto del artículo gracias a la amabilidad y benevolencia de mi amigo Gabriel Ruiz, he procedido a leerlo con atención... y a sorprenderme otra vez.

En efecto, el artículo de la Dra. MVM contiene afirmaciones que invitan a la polémica y, por qué no decirlo, al debate apasionado: su propósito evidente es demostrar que Luis Vidales fue errático, inconsecuente, veleidoso y caprichoso en su vida personal y política.

Pese a la tentación de responder a este planteamiento, que me parece incorrecto, me daré el gusto de no entrar ni en debates ni en polémicas, limitándome a señalar los clamorosos errores y las "sonoras" contradicciones, omisiones e inconsecuencias en que ha incurrido la Dra. MVM, esperando sinceramente que mis observaciones sirvan para ajustar la perspectiva histórica y precisar los hechos.

Enumeraré por ello, sin más preámbulos, los puntos débiles e inconsistentes del artículo en cuestión, cuyo texto íntegro puede ser cotejado en la página electrónica de NTC (http://ntcblog.blogspot.com/2006_12_10_archive.html).

1- "Vidales, confeso estalinista en su momento" (p. 92). Error. Vidales fue confeso estalinista en todo momento.

2- "Una imprenta de caucho comprada en la librería de Salvador Camacho y Roldán" (p.93). Error. Se trata de Salvador Camacho Roldán, una sola persona.

3- "...en el Banco de Londres y América del Sur, donde hizo una carrera fugaz: comenzó como cajero y pronto lo nombraron jefe de contabilidad" (p. 94). ¿Qué se entiende por "fugaz"? Trabajó varios años ahí, y solamente renunció en 1926 cuando emprendió su viaje a Europa. Su carrera en el banco tuvo un ascenso rápido, pero de ninguna manera "fugaz".

4, 5, 6- "En 1927 recibió del gobierno de Abadía Méndez el nombramiento de secretario del consulado colombiano de Génova, donde permaneció ocho meses. Con estos apetecibles cargos el general intentó neutralizar los ánimos de los jóvenes intelectuales de izquierda" (p. 94). Dos errores y una omisión: El presidente Miguel Abadía Méndez (1867-1947) no era general sino abogado, hombre de letras, humanista y político. El cargo que dio a Vidales (Cónsul General en Génova) no fue para "neutralizar" a los jóvenes de izquierda, sino un favor personal solicitado por la madre de Vidales, dado que el poeta se estaba muriendo de hambre en París. Luis Vidales renunció a su cargo como protesta por la masacre de las bananeras, en 1928. Que yo sepa, es el único funcionario diplomático en la historia de Colombia que ha renunciado a su cargo para repudiar una masacre cometida por agentes del gobierno.

7- "Incluso por esos días apareció una foto del díscolo poeta dándole la mano al jefe del Estado italiano Benito Mussolini" (p.94). Omisión del contexto: "incluso por esos días" Vidales presentó sus credenciales ante el Duce y, como era obligatorio y de ceremonia, le dio la mano. Mussolini comentó: "Colombia è un bello paese de L'America Centrale..." Y Vidales inició una réplica inmediata: "Ciertamente, y supongo que también es un bello país de..." No alcanzó a terminar de decir "...América del Sur" porque un colega le dio un fuerte codazo para imponerle prudencia. Musolini captó la situación y, molesto, le dio la espalda al poeta y no le volvió a hablar. También "incluso por esos días" Vidales trabó contacto con Palmiro Togliatti, secretario general delPartido Comunista italiano.

8- "Luis Tejada, el príncipe de los cronistas que retrató varias veces a Vidales como un sapo" (p. 94). Error: no fue el cronista Luis Tejada sino el dibujante y caricaturista Ricardo Rendón quien caricaturizó a Vidales como un sapo, para molestarlo, pues mantenía con él una amistad conflictiva.

9- "Y tan elegante como Gaitán se paseaba por las calles y cafés parisinos" (p. 94). Error. Vidales fue en París un estudiante pobre, medio muerto de hambre, y sus elegancias extravagantes eran arreglos de apuros. Adoptó una facha excéntrica para disimular su pobreza con humor, obligado como estaba a mostrarse "vestido en pleno invierno con traje de verano".

10, 11- Dice que Vidales tuvo una relación con el Partido Comunista "con largas separaciones de la cúpula y disidencias hacia el liberalismo de izquierda" (p. 95). Error y mal manejo de la información: fue una sola larguísima marginación de la militancia, sin ninguna "disidencia". Su trabajo dentro del liberalismo de izquierda fue claramente una misión encomendada por el propio Partido Comunista, como Vieira lo reconoció en su momento según consta en el mismo artículo de MVM: "Según su amigo y copartidario Gilberto Vieira, al partido le pidieron candidatos para trabajar en Jornada y la directiva propuso a Vidales y a Renato Arango" (p. 96), y como se prueba por la conducta política de Vidales dentro del Partido Liberal. Y en la p. 97 cuenta MVM que lo primero que hizo Vidales al regresar a Colombia de su exilio chileno, en 1960, fue pedir la militancia en el Partido Comunista, y que Vieira le respondió: "Métete en lo más hondo del partido liberal". Aquí hay que sumar, por tanto, otro error: abierta contradicción entre lo que se sostiene en la p. 95 (disidencias) con el testimonio de Vieira en la p. 96, y la instrucción partidaria del mismo Vieira en la p. 97, lo que indica desorden y negligencia en el manejo de los apuntes que han servido de base para escribir el artículo.

12- "Pero debido a sus actos de desobediencia con el Partido y a la enemistad que mantuvo con el camarada Ignacio Torres Giraldo, el poeta fue apartado de su cargo directivo en 1934" (p. 95). ¿Cuáles fueron esas "desobediencias"? No lo dice. Lo que hubo fue una diferencia de concepciones sobre la estrategia revolucionaria. Vidales sostenía entonces que la revolución socialista podía realizarse a partir de las insurrecciones agrarias y por eso mismo organizó y llevó a efecto muchos alzamientos campesinos, que le valieron cárcel y persecuciones y que fueron el motivo fundamental de su marginación. El estalinismo (Tercera Internacional) sostenía que solamente el proletariado industrial podía ser el sujeto activo de la revolución y que no se debía dar prioridad a las luchas campesinas. A partir de las sanciones de la Tercera Internacional contra Vidales, las luchas agrarias en Colombia, iniciadas por el Partido Comunista, decayeron notablemente y Gaitán aprovechó la ocasión para dar impulso a sus Ligas Campesinas. Volvieron a tomar impulso recién en 1948, después del asesinato de Gaitán. Y en 1949, el triunfo de la revolución china, bajo la dirección de Mao Tse Tung, mostraría que las tesis de Vidales no eran tan disparatadas.

13- "En esos años Vidales se volvió Lopista" (p. 96). Grave omisión del contexto histórico y político. No dice cuáles fueron "esos años". El apoyo comunista a la candidatura de Alfonso López Pumarejo para las elecciones de 1942 fue decidido por la Tercera Internacional a mediados de 1941, al producirse la agresión nazi contra la Unión Soviética. La Segunda Guerra Mundial estaba en su apogeo. La Unión Soviética se hallaba destrozada y al borde del colapso a causa del feroz ataque hitleriano. La Tercera Internacional, a través de su Comintern, impartió órdenes perentorias a todos los partidos comunistas del mundo capitalista, para que apoyaran a los líderes democráticos que pudieran garantizar una lucha eficaz contra el fascismo y el nazismo. Estas instrucciones se cumplieron en el mundo entero, hasta el extremo de que, por ejemplo, en Argentina, los comunistas entraron en la Alianza Democrática con todos los partidos (incluidos los ultraconservadores) para enfrentarse a Perón (sin éxito). En Colombia, el Partido Liberal estaba dividido y no podía decidir si el candidato oficial sería Alfonso López Pumarejo (progresista) o Carlos Arango Vélez (derechista). El jefe conservador, Laureano Gómez, en abierta intromisión en los asuntos internos del liberalismo, declaró su apoyo a Carlos Arango Vélez. Entonces el país entero se electrizó, el pueblo "se volvió Lopista" y los resultados fueron estos: López (liberal), 673.169 votos; Arango Vélez (oligarquía liberal-conservadora), 474.637 votos. Pese a la división liberal, las fuerzas progresistas del país lograron derrotar al candidato de la reacción. Es en este contexto histórico y político que Luis Vidales, fiel a las directivas de la Tercera Internacional, apoyó la candidatura de López, lo que de ninguna manera significa que "se volvió Lopista".

14- "... en 1946 votó por Gabriel Turbay, a pesar de ser tan amigo de Jorge Eliécer Gaitán, quien representaba la disidencia del liberalismo" (p. 96). Otro error por omisión de contexto histórico y político. Vidales era comunista, no votaba por amistad sino por disciplina política. Gabriel Turbay era el jefe único del liberalismo. La Segunda Guerra Mundial había terminado, se iniciaba la Guerra Fría con la enunciación de la Doctrina Truman. El Partido Comunista colombiano libraba una feroz lucha contra el duranismo y el browderismo. Se decidió entonces apoyar al candidato oficial del liberalismo (Gabriel Turbay) y aconsejar a Gaitán que no dividiera las fuerzas populares y democráticas. Gaitán desoyó el consejo. Los resultados de las elecciones de 1946 mostraron cuán errónea había sido la táctica divisionista: Mariano Ospina Pérez (conservador), 565.939; Gabriel Turbay (liberal, candidato oficial), 441.199; Jorge Eliécer Gaitán (liberal disidente) 358.957. El país está pagando todavía las terribles consecuencias de esta división. Es interesante constatar que José Luis Díaz-Granados, si hemos de creer en la versión que ofrece MVM (p. 96), marxista y amigo de Vidales, tampoco parece entender el contexto histórico y político en que el Partido Comunista (no solamente Luis Vidales) decidió el apoyo a Gabriel Turbay.

15, 16- "Justamente durante el régimen de Laureano Gómez se desató una persecusión política que le costó a Luis Vidales, en 1951, la expulsión de la Universidad Nacional" (p. 96). Dos errores: primero, no se escribe "persecusión" sino persecución; segundo, Luis Vidales fue destituido por el señor Designado Roberto Urdaneta Arbeláez. Si bien Vidales y Laureano Gómez se odiaban políticamente, no fue Laureano quien destituyó a Vidales. Por otra parte, esto no ocurrió porque se hubiera desatado "una persecusión política", sino porque Colombia vivía el período histórico conocido como La Violencia, o La Guerra Civil No Declarada, período muy conocido y muy estudiado, que costó la vida a cientos de miles de colombianos y que se inició en 1946, bajo el régimen de Mariano Ospina Pérez, y terminó en 1954, con el programa de pacificación implementado por el presidente de facto Gustavo Rojas Pinilla.

17- "Y un año después [o sea en 1952], durante el régimen del general Rojas Pinilla, empezó a sentirse perseguido como funcionario público" (p. 96). Grave error: Gustavo Rojas Pinilla no estaba en el poder en 1952, pues su célebre "golpe de opinión" se realizó el 13 de junio de 1953, y para esas fechas Vidales y su familia ya llevaban varios meses de residencia en Chile, como asilados políticos. Para Rojas Pinilla hubiera sido un poquito difícil perseguir al comunista Vidales pues en ese año el general se encontraba en Corea, matando comunistas como jefe delBatallón Colombia y con un grado inferior: Teniente General.

18- "Entonces se le presentó la oportunidad de irse al exilio argentino pero terminó sentando sus reales en Chile porque le ofrecieron [¿qué?] como asesor técnico en la Oficina Nacional de Estadística" (p.96). Omisión de datos esenciales para entender a Luis Vidales. Como jefe de Publicidad y Propaganda de los Censos Nacionales, cumplió a cabalidad su misión hasta la realización del censo de 1953. Solamente entonces renunció a su cargo. El presidente argentino Juan Domingo Perón le había ofrecido asilo y un empleo público, que en principio aceptó. Pero al entrar en territorio chileno con su familia (por Arica, en la frontera con el Perú), recibió un telegrama del presidente chileno Carlos Ibáñez de Campo, en el cual le ofrecía asilo inmediato y un cargo en la Oficina Nacional de Estadísticas. La familia Vidales viajó, pues, a Santiago, y en el aeropuerto esperaban al pie de la escalerilla del avión, los edecanes militares del presidente (al lado derecho) y varios miembros del Comité Central del Partido Comunista chileno (al lado izquierdo). Que los comunistas de más alto rango arriesgaran su seguridad para esperar a Luis Vidales (el PC era entonces ilegal y clandestino en Chile), es un dato muy elocuente y confirma que Vidales era hombre de la más alta confianza del comunismo internacional. Entre los comunistas que esperaban a Vidales en el aeropuerto de Cerrillos se encontraba el ensayista y novelista Volodia Teitelboim, quien había pasado largos meses en un campo de concentración en Pisagua, bajo la vigilancia de un coronel que llegaría a ser muy conocido en el mundo entero: Augusto Pinochet.

19, 20, 21- "En este periplo chileno estrechó su amistad con Pablo Neruda, a quien había conocido en París, y con Salvador Allende. Quizá la cercanía con el mandatario democrático lo llevó a hurgar en la vida de Juan Antonio Ríos, un presidente liberal de quien escribió una extensa biografía, todavía inédita." " la (p. 96). Tres errores: primero, Salvador Allende era senador por el Partido Socialista de Chile, y a los parlamentarios no se les da el calificativo de "mandatarios" aunque en rigor hayan recibido un mandato; segundo, Juan Antonio Ríos no fue presidente "liberal" sino miembro y dirigente del Partido Radical, elegido en 1942 presidente de la república por el Frente Popular (socialistas, radicales, comunistas e independientes), precisamente según la estrategia de la Tercera Internacional que ya he mencionado a propósito de la elección de López Pumarejo en Colombia (tanto Ríos como López Pumarejo declararon la guerra contra el Eje); y tercero, Vidales tomó la decisión de escribir la biografía de Ríos, no por la "cercanía" con nadie, sino porque se había abierto un concurso para ello y el poeta exiliado necesitaba el dinero, pues el sueldo era muy bajo y todos los recursos se habían ido en la compra de una vivienda. Vidales ganó el concurso y el dinero, pero las presiones de la familia Alessandri, enemiga de Ríos, impidieron la publicación de la obra, cuyo original inédito se encuentra en mi poder.

22- Hablando de los dos hijos mayores de Vidales, dice: "Carlos y Luz pertenecían al partido socialista y durante el golpe militar a Allende les bombardearon la casa y tuvieron que esconderse en la Embajada de Colombia." (pp. 96-97) Error. No nos bombardearon la casa, sino el lugar de trabajo, porque trabajábamos en el Palacio Presidencial (La Moneda), con Salvador Allende. Y nos buscaban para fusilarnos.

23, 24- "En estos años [después del exilio chileno] también estrechó Vidales su amistad con la colonia judía y sirvió de traductor para dos libros: Yo vi crecer un país, de Simón Guberek, su amigo y benefactor y Gentes en la Noria, del olvidado escritor Salomón Brainski..." Error y confusión. El libro de relatos Gentes en la Noria, fue presentado por Luis Vidales en el suplemento dominical de El Tiempo, de Bogotá, el domingo 8 de marzo de 1942 (páginas 1 y 2), muchos años antes del exilio chileno del poeta. La obra se publicó en Buenos Aires en 1945 (Editorial Judaica). El libro del polaco-judío Guberek Yo ví crecer un país fue publicado efectivamente en 1974, después del exilio chileno de Vidales. Pero Vidales fue protector de los judíos perseguidos por el nazismo ya en la década de 1930 y en nuestra casa recibieron asilo y hospitalidad muchos de ellos. Por eso mismo, la colonia judía siempre fue generosa con nosotros en los días difíciles de Chile, lo que no nos ha impedido ser críticos ante la política del Estado de Israel. MVM dice que después del exilio chileno de Vidales (o sea después de 1960) eran "los tiempos de la lucha contra el socialnacionalismo y los miembros del partido comunista se sintieron solidarios con la causa de los judíos perseguidos." (p. 97). Grave error histórico: el período de la lucha contra el nacionalsocialismo abarca las décadas de 1930 y 1940 principalmente.

1978 25- Viene hablando de la detención de Vidales en 1979 y dice enseguida: "En ese mismo año de 1978 el periodista Isaías Peña Gutiérrez llevó a La Habana para su publicación La Obreríada" (p. 97). Error de desorden en los apuntes. 1979 no puede ser nunca "ese mismo año de 1978". La Obreríada, que es en realidad una antología de poemas de diversas épocas, se publicó en La Habana en agosto de 1978 y ya circulaba en Colombia cuando el general Vega Uribe, asesorado por los caballos de la Escuela de Caballería, ordenó el allanamiento y detención contra el poeta.

26- "...un gran critico de arte y un maestro con mucho ascendente entre la juventud." (p. 98). Error. Querrá decir ascendiente (predominio moral e influencia), porque ascendente es el que asciende, y a Luis Vidales nunca le interesó el alpinismo.

27- "Pero lo cierto es que este comunista convencido hasta la médula disfrutaba de la vida burguesa." (p. 98). Grave error. No tuvo automóvil ni acciones capitalistas, ni miró nunca las oscilaciones de la Bolsa de Valores, ni tuvo fábricas ni empresas ni empleados ni obreros ni vivió de la plusvalía. Fue austero. Le gustaba el whisky pero bebía del más barato o, lo que era muy frecuente, el que le obsequiaban los amigos. Fumaba cigarrillos ingleses, que costaban lo mismo que mis Lucky Strike. Le gustaba la buena mesa, pero comía en muy pequeñas cantidades. No tuvo jamás casa de campo, ni piscina. Su mayor tesoro fue su biblioteca y, a diferencia de los burgueses, tenía su biblioteca dentro de la cabeza, no solamente en los estantes.

28- "Viajó cuanto quiso por el mundo, su pasión desde joven." (p. 98). Falso. Nunca viajó por placer. Viajó a estudiar a Francia en 1926. Recorrió Europa como estudiante pobre, buscando conocimientos. Visitó Brasil en misión periodística a mediados de la década de 1940. Viajó a Chile como exiliado y perseguido, en 1953. Viajó a la Unión Soviética y a los países de Europa Oriental con viajes pagados por su Partido, en misiones políticas. Viajó a la China en 1950, para representar a Colombia en el Congreso Mundial por la Paz, con pasajes pagados por su Partido. Viajó a Moscú en 1954 para participar en el Congreso de Escritores Soviéticos, con pasaje pagado por el Partido Comunista de la Unión Soviética. Las únicas vacaciones que se tomó en su vida fueron: una semana en el Golfo de Morrosquillo en 1950; una semana (conmigo) en la Laguna de Tota en 1951; una semana en un pueblo del Valle Central de Chile, en 1959, junto con los hijos menores; y un tratamiento médico de dos meses en Turcmenia o Turkmenistán (no Turmenia) y en el Mar Negro, en la década de 1980, pagado por su Partido.

29- "Lo curioso es que nunca viajó acompañado de su esposa en estos viajes de camaradas." (p. 99). Inconsecuencia. Antes era "vida burguesa", ahora son "viajes de camaradas". Y si son viajes de Partido, no es de ninguna manera curioso que la esposa no lo acompañe. Sin embargo, puedo dar testimonio de que ella nunca quiso ser militante activa del Partido Comunista ni participar de esos viajes, aunque ideológicamente fue siempre solidaria con su compañero.

30- "...incluso se fue al exilio chileno con un buen cargo diplomático, salvoconductos y dinero suficiente." (p. 99). Falsedad. ¿Cuál cargo diplomático? ¿Quién se lo dio? El supuesto general Rojas Pinilla, que no era general sino teniente general, y que no estaba en el poder cuando Vidales se fue al exilio, a pesar de lo que afirma MVM (p. 96), y por lo tanto no podía hacer al poeta objeto de "persecusión" ni de persecución, y mucho menos darle "un buen cargo diplomático"? La familia Vidales salió de Colombia con los pocos ahorros del poeta y con el dinero que su esposa obtuvo con la venta de su casa de Los Mártires, antigua herencia de su padre, Aristídes Rivera. Todo investigador está obligado a comprobar sus informaciones cuando son del calibre de las que estoy comentando, para evitarse juicios por calumnia, o por lo menos para evitarse el epíteto de pésimo investigador.

31, 32- "Este confeso burgués no pasó pues la afugias del proletariado". (p. 99). Cita falsa. "Confeso" significa que ha confesado. ¿Cuándo confesó Luis Vidales ser un burgués? Por otra parte, no encuentro la palabra "afugia" en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua, ni en el Diccionario Panhispánico de Dudas, ni en el Tesoro de la Lengua Española (69 diccionarios desde 1495 hasta nuestros días) ni en el Corpus del Español (100 millones de entradas desde el siglo XI hasta nuestros días). Aparece 242 veces en internet, siempre en textos colombianos y una vez en un estudio sobre la lengua de Samoa. La única definición (indirecta) encontrada dice: "Agite: colombianismo que significa lo mismo que atafago y es pariente cercano de la afugia y del despelote. Si quiere más detalles, escríbame a olmuser@gmail.com. Con gusto le aclaro el significado." No me parece, pues, un vocablo destinado a mejorar el nivel de un trabajo universitario, a menos que se trate de un estudio sobre el slang o el argot.

33, 34- "Y aunque sus casas siempre estuvieron decoradas de forma austera y no tuvo mayores apegos materiales, dicen que no se recuperó nunca del robo de su colección de pipas traídas de todo el mundo." (p. 99). Inconscuencia y falta de rigor. Antes "disfrutaba de la vida burguesa" (p. 98) y era un "confeso burgués" (p. 99). Ahora resulta que "no tuvo mayores apegos materiales". La formulación "dicen que" sin indicar la fuente, es ajena al nivel de un trabajo universitario. La famosa colección de pipas es un mito: Jamás tuvo más de cinco pipas: dos francesas, una italiana y dos inglesas.

35- "Carlos Vidales, el hijo mayor ex-militante del M 19 y residenciado desde 1982 en Suecia" (p. 100). Falso. Yo estoy "residenciado en Suecia" desde el día 2 de octubre de 1980. La fecha es importante, porque los servicios de "inteligencia" colombianos han querido involucrarme en un crimen cometido en 1981 en Colombia. Les salió el tiro por la culata, porque mi presencia en Suecia está documentada por la misma policía sueca.

36- "La hija mayor, Luz, que también da clases de literatura en la Universidad de Estocolmo..." (p.100). Error. Luz no da clases de literatura en la Universidad de Estocolmo.

38- "... y su nieta favorita Pauline" (p.100). Error. Se llama Paulette.

39- "Vidales era un hombre extremadamente machista, que ya en algunos de sus escritos de juventud dejaba perfilar cierta misoginia, como cuando comenta que las mujeres solteras constituyen un desperdicio porque su única función en el mundo es la de parir hijos." (p. 100). Tergiversación. ¿Dónde está la cita exacta? Vidales ironiza sobre la concepción burguesa de la mujer, no está diciendo que esa es su concepción. En cambio dice, textualmente: "Todo el gran misterio de la mujer consiste en que el hombre la cree de naturaleza distinta a la suya" (Suenan Timbres, 2a. ed, Colcultura, 1976, p. 184). Y dice también: "Si comprendiéramos que el hombre sólo se escucha a sí mismo, nos alarmaríamos de la soledad universal" (Ibid., p. 186). Y en el poema "Auto-semblanza", ironizando sobre la idea burguesa de que las mujeres son simples "jugueticos" que nos dio "El Señor", le pide a este Señor (irónicamente, porque el poeta es ateo) que le mande uno de esos jugueticos "para hablar de cosas razonables" (Ibid., pp. 104-105). A Vidales le encantaban las mujeres intelectuales y se pasaba horas conversando con ellas sobre temas de filosofía, literatura, historia y cultura en general. En una entrevista de 1990 con José Luis Díaz-Granados, pocos meses antes de su muerte, dijo: "El machismo comenzó cuando inventaron que Dios era hombre".

40- Refiriéndose a la esposa de Luis Vidales dice: "Recién casados, a Paulina, que tenía talento para el piano, le ofrecieron tocar en una emisora, pero él no la dejó porque su lugar era la casa." (p. 100). Tergiversación y falsedad. Paulina Rivera de Vidales dio clases de piano durante algunos años después de casada. Tuvo una activa vida social. Asociada con su hermana Valentina siguió un curso de mecánica dental y entre las dos arreglaron las dentaduras de todas las monjitas del Colegio de la Enseñanza, dejándolas con unas radiantes sonrisas de caballo y ganando, de paso, una pequeña fortuna. Estudió repujado del cuero con los Hermanos Maristas y además de hacer ella misma el suntuoso juego de comedor de nuestra casa, con reproducciones repujadas de Picasso y de Mattisse, hizo muebles igualmente magníficos para otros clientes de dinero. También en sociedad con Valentina modeló, durante años, bellas y diminutas muñequitas de algodón para usar como prendedores, que se vendían muy bien en los almacenes elegantes de Bogotá. En Chile participó en cursos de artesanía en textiles y en cerámica, hizo arreglos florales, practicó el yoga. Salía con mucha frecuencia de la casa, iba al cine con las amigas o las hermanas, asistía a conciertos, visitaba museos y exposiciones. Hizo sola dos viajes a la Argentina y Uruguay, y en compañía de una amiga realizó un largo viaje por Europa (España, Francia, Italia, Austria, Checoslovaquia, Polonia, Hungría). Fue cómplice de los hijos menores en sus artesanías de cerámica, sus pinturas, sus textiles. Escribió algunos cuentos (dos de los cuales se publicaron en Chile). Mientras vivimos en Colombia, antes del exilio chileno, tuvimos siempre empleadas domésticas y mi madre nunca tuvo que preparar comidas o hacer limpiezas. Durante el exilio chileno fuimos mi hermana mayor y yo quienes nos ocupamos de la mayoría de los quehaceres domésticos. Mi madre era inteligente, culta y completamente fiel a mi padre, pero de ninguna manera tenía un "temperamento tranquilo y resignado", y definitivamente no pensaba que "su lugar era la casa".

41, 42- "Aunque se declaraba un enamorado de las mujeres, y tuvo muchas amigas en su vida, prefería fantasear con ellas. Siempre fiel a la causa, se dice que no tuvo amantes porque el comunismo sólo toleraba la monogamia y tampoco aprobaba las separaciones y divorcios." (p. 101). Falsedad y tergiversación. No prefería "fantasear", prefería hablar con ellas de cosas razonables, porque se negaba a ver a la mujer como un simple objeto sexual, las quería como interlocutoras, con su propio cerebro y su propia personalidad. No tuvo amantes porque era monógamo, de la misma manera natural en que lo son los leones o los halcones, y de la misma manera natural en que otros hombres son polígamos. Por eso, a diferencia de esos hombres, Vidales tuvo verdaderas amigas, fenómeno que no cabe en el cerebro de muchos colombianos.

43- "A los que sí adoraba era a los animales, especialmente a los gatos y a su perrita pequinesa." (p. 101). Error. No era perrita, era perrito y se llamaba Yuri.

44- "Igual admiraba a Maquiavelo, cuyos maquiavélicos principios exaltó en un extenso ensayo." (p. 101). Insinuación mañosa. ¿Cuáles son esos maquiavélicos principios que Vidales exaltó? ¿Qué dijo Vidales en su "Defensa de Maquiavelo" (Notas para un juicio, Revista de las Indias, No. 8, agosto de 1939, pp. 30-52)? MVM omite esta información y deja al lector a merced de sus propios prejuicios contra Maquiavelo, el genio político más satanizado en la historia de Occidente. Lo que Vidales hace es, precisamente, intentar demostrar que esos prejuicios antimaquiavélicos son infundados, irracionales, monacales, clericales. En un suplemento dominical de El Tiempo (23 de junio de 1940), se publicó otro ensayo de Vidales titulado "De Nicolás maquiavelo a los Dictadores Totalitarios". En él dice: "Maquiavelo surge hoy en todo el señorío de su pensamiento, como el mayor racionalista de una era que todavía conservaba en sus entrañas la ausencia de espíritu crítico de la Edad Media". Y comentando la obra del genio florentino, dice que es "el análisis histórico más desprovisto de prejuicios que se haya conocido". Luis Vidales es el primer pensador colombiano que llama la atención sobre la revolución intelectual que Maquiavelo encarna, como ideólogo del racionalismo científico frente al dogmatismo medieval, es decir, como el pensador que proclama que el arte de la política es el resultado de un proceso intelectual, de cálculos racionales, no el fruto de los caprichos de algún Dios. Por esos mismos años, el genio admirable de Antonio Gramsci escribía lo mismo en sus cuadernos de la cárcel, y se da el caso de que Vidales, en la aldea monacal y cretina de Bogotá, coincidía con Gramsci sin haber tenido la posibilidad de comunicarse con él (los textos gramscianos se publicaron recién en 1949, bajo el título Note sul Machiavelli, sulla politica e sullo Stato moderno, por la ed. Einaudi). Colombia debería sentirse orgullosa de haber parido un intelectual como Luis Vidales, en lugar de seguir arropando prejuicios mezquinos bajo las sotanas de los curas.

45- "Otra de sus grandes contradicciones la encontramos en el prólogo que escribió del libro Los Años veinte en Colombia, de Carlos Uribe Celis (1985). En su análisis se aprecia la enorme importancia que concedió Vidales, como estudioso de la ciencia económica, a la Misión Kemmerer, de 1923, que para él fue el punto de partida de la transformación del país de la etapa pastoril del siglo XIX al XX. Considera Vidales que los dos cambios dramáticos del siglo fueron esta misión y el Frente Nacional en 1958, lo que resulta paradójico, dada su postura de izquierda. No hay que olvidar que la misión Kemmerer, que aconsejó la creación de un banco estatal para la emisión monetaria, también fue duramente criticada por su orientación capitalista." (p. 102). MVM muestra aquí una incomprensión absoluta de las categorías marxistas. Los marxistas apoyan el desarrollo capitalista contra el feudalismo y la sociedad semicolonial, y apoyan al socialismo contra el capitalismo. La misión Kemmerer impulsó el país hacia adelante, en contra de la Colombia semifeudal y semicolonial, y creó las condiciones para el desarrollo de un proletariado moderno, sin el cual no hay revolución socialista posible (al menos, según la ecuación de la Tercera Internacional).

46- "A León de Greiff a veces lo criticaba fuertemente y otras lo admiraba." (p. 102). Confusión torpe. Lo quería y lo admiraba como amigo leal y sincero. Pero no compartía sus criterios poéticos.

47- "Al periodista Osorio Lizarazo siempre lo consideró un resentido social y no le perdonó su colaboración con la dictadura de Trujillo, aunque fue muy generoso en sus juicios críticos sobre la novela Casa de vecindad." (p. 102). Lo uno no impide lo otro, aquí no hay ninguna contradicción. Osorio Lizarazo era un buen escritor. Vidales fue también muy generoso cuando Osorio Lizarazo llegó a Chile, huyendo de Trujillo, después de haber sido su lacayo. Mi padre me lo explicó así: "A un desterrado hay que darle la oportunidad de que se redima de sus errores pasados y aliviarle su tragedia, porque el destierro es un infierno". Y de verdad, Osorio Lizarazo sufría un verdadero infierno de vergüenza, rechazado por todos, aislado y en la pobreza.

Conclusión

Cuarenta y siete errores, omisiones e inconsecuencias en un texto de setenta párrafos, nos dan la bonita cifra promedio de un error por cada párrafo y medio (1,489). Por lo menos cinco de esos errores son muy graves, especialmente las omisiones del contexto histórico, político y social. Muy significativo es el hecho de que solamente uno de los cuarenta y siete errores puede considerarse "en beneficio" de Luis Vidales (cuando dice que el poeta fue estalinista "en su momento"). La norma del artículo es que los errores, omisiones e inconsecuencias están claramente parcializados en perjuicio del poeta.

La autora confunde presidentes, años y lugares. Da el título de general a un presidente civil, trata a una de las más ilustres figuras históricas del liberalismo como si fueran dos personas, ignora la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría, hace afirmaciones sobre la vida íntima de las personas con la formulación "dicen que..." y sin citar fuentes, no sabe distinguir entre el cronista Tejada y el dibujante Rendón, sostiene que Vidales salió al exilio perseguido y al mismo tiempo "con un buen cargo diplomático", trivializa el período histórico de La Violencia con la fórmula "se desató una persecusión" [sic], afirma que Vidales era un "confeso burgués" que "disfrutaba de la vida burguesa", y acto seguido informa que "no tuvo mayores apegos materiales", confunde "fugaz" con "rápido", "marginación" con "disidencia" y "ascendiente" con "ascendente", ignora la diferencia entre la amistad y los principios, y no puede distinguir entre la estimación personal y el juicio literario crítico. Por tales razones, siempre estará condenada a considerar como una contradicción "sonora" (¿querrá decir "clamorosa"?) el hecho de que un marxista vote por convicción ideológica y táctica política, y no por amistad; y tampoco podrá entender jamás que admire y quiera a un amigo, aunque al mismo tiempo critique su literatura o su poesía. En suma, lo que el artículo de MVM pone de manifiesto no son las debilidades o inconsecuencias de Luis Vidales, sino las de la autora del texto.

Carlos Vidales
Estocolmo, enero de 2007

7 comentarios:

William Fernando Abaunza Romero dijo...

Señor Carlos Vidales:
Pido de la manera más cordial, ud me colabore con un escrito, que hable sobre la vida escondida que tiene El Escritor Luis Vidales, quisiera saber que pensaba y que hacía mientras escribía sus poemas, ya que tiene apartes muy interesantes.
Me gustaría saber si puede colaborarme.
Cordial Saludo;
William Abaunza

William Fernando Abaunza Romero dijo...

Mis correos electrónico es: williamfernandoabaunza@yahoo.es y williamfernandoabaunza@gmail.com

William Fernando Abaunza Romero dijo...

Mis correos electrónico es: williamfernandoabaunza@yahoo.es y williamfernandoabaunza@gmail.com

Unknown dijo...

Sr.Carlos Vidales: Tuve la oportunidad de leer y verificar algunos apartes de lo que Ud. escribio; mis respetos por Ud. y un aplauso por realizar una replica con altura y objetividad.
Muchas gracias por permitirme aprender de Ud. como hacerlo
Jorge Ignacio

Carlos Vidales dijo...

Muchas gracias, Jorge Ignacio. Le deseo los mejores éxitos en la vida.

Carlos Vidales

Óscar Cataño dijo...

Pregunto al Profesor Carlos vidales si conoce el trabajo del Profesor Gustavo Bríñez sobre LUIS VIDALES. GRACIAS

Carlos Vidales dijo...

Sí, conozco el trabajo del profesor Gustavo Bríñez Villa, quien tuvo la amabilidad de enviármelo, con dedicatoria, en julio de 2002. Es un estudio breve (150 páginas), muy bien escrito, de juicios muy equilibrados y serios. Valoro mucho que no caiga en la retórica rimbombante que es tan común entre los críticos colombianos. El profesor Bríñez ha indagado con seriedad en la obra de Luis Vidales, desde Suenan Timbres hasta sus últimos libros. Particularmente interesante me pareció su análisis sobre El libro de los fantasmas.